UAM-X signa convenios en materia sísmica de suelos y construcciones seguras
*Proponen incorporar en los planes de estudio el tema de “Arquitectura sísmica”
Reportera: Guadalupe Ochoa Aranda
Fotografías: José Ventura Flores Velasco
El doctor Francisco Javier Soria López, rector de la Universidad Autónoma Metropolitana- Xochimilco, firmó un convenio de colaboración con el Instituto para la Seguridad de las Construcciones en la Ciudad de México, dirigida por el doctor Renato Berrón Ruíz, y con la empresa Sísmica de Suelos, a cargo del doctor Héctor Raúl Aguilar Becerril. En ambos convenios, las partes se comprometen a coordinar esfuerzos para desarrollar diversos programas de investigación, servicio social, capacitación, difusión y uso de información científica y técnica, entre otros aspectos.
En un acto protocolario, presidido por la doctora Irma Gabriela Anaya Saavedra, coordinadora de Vinculación y Fortalecimiento Académico de esta sede académica, el doctor Soria López agradeció al doctor Salvador Duarte Yuriar, adscrito al área de investigación de Espacios Habitables y Medio Ambiente, de la División de Ciencias y Artes para el Diseño (CyAD), por el impulso que ha dado para generar proyectos en materia de seguridad en construcciones relacionada con la sísmica de suelo, desde que ocurrieron los sismos de 1985 y 2017.
Frente a una amplia comitiva presente en la celebración de ambos convenios, el rector aplaudió esta iniciativa a nivel académico-gubernamental-privado, para abordar la seguridad de las construcciones y el tipo de suelo en donde éstas se edifican. Señaló que, si bien no se puede anticipar la actividad sísmica de alto nivel, sí se pueden dictaminar ordenamientos que apuntalen las condiciones de seguridad que, sin duda, salvarán muchas vidas cuando se trate de una catástrofe natural.
Por su parte, el doctor Raúl Aguilar comentó que la empresa Sísmica de Suelos, a 20 años de existencia, surgió de “un grupo de jóvenes ingenieros entusiastas que, en el pasado, colaboramos con el Centro de Investigación Sísmica de la Fundación Javier Barros Sierra, que surgió por las consecuencias que dejaron los sismos de 1985. En nuestros proyectos de ingeniería tratamos de entender cómo es que se comporta el suelo ante la acción sísmica”, dijo.
Agregó que en su empresa “participan jóvenes estudiantes, quienes pueden realizar sus prácticas y, muchos de ellos, se han quedado a trabajar en nuestros proyectos”. Dijo que tienen la responsabilidad de registrar cómo se comporta un edificio que debe “soportar una fuerza igual a la aceleración de la gravedad de forma lateral”. Asimismo, los elementos estructurales, sus columnas y sus trabes, deben tener la suficiente resistencia para soportar esa fuerza sísmica, precisó.
El especialista finalizó su intervención diciendo que “la empresa cuenta con equipos de exploración, tanto técnica como geofísica, que no sólo nos permite entender el comportamiento sísmico de la ciudad, sino cuestiones de ingeniería sísmica en México”.
En su oportunidad, el doctor Renato Berrón Ruíz comunicó que el Instituto para la Seguridad de las Construcciones en la Ciudad de México tiene, entre sus objetivos: supervisar la seguridad estructural, hacer dictámenes oculares, revisiones médicas profundas de los edificios (con modelos matemáticos en computadora), investigación en materia de seguridad estructural, capacitación para los directores responsables de obra y corresponsables, esto último con el fin de resellar y refrendar sus credenciales. La dependencia “controla y supervisa a los directores responsables de obra y a los corresponsables en seguridad estructural y estamos íntimamente ligados a la seguridad de los edificios tras algún sismo”, agregó.
Argumentó que el presente convenio tiene por objetivos: la impartición de cursos de capacitación, tanto para jóvenes universitarios, como a los corresponsables del instituto, en los cuales participarán expertos en materia de suelo de ambas partes y se podrá contar con las amplias instalaciones de la UAM Xochimilco.
Exhortó a los futuros arquitectos a que se capaciten en ingeniería sísmica dado que es un área de oportunidad, en la medida en que día con día se requieren profesionales con este perfil. “No se trata de que tengan un alto nivel de conocimiento en matemáticas ni que hagan modelos matemáticos en las computadoras ni grandes cálculos, es tener conocimiento sobre la geometría de los edificios, indispensable cuando ocurre un sismo”.
Reconoció la importancia de colocar en los planes de estudios universitarios la materia a la que él llamaría “Arquitectura Sísmica”, en la cual se abordaría la regularidad de los edificios (rigidez-flexibilidad), tipos de suelo, evitar las grandes salientes, la separación colindante de un edificio con respecto del otro, entre otras particularidades, que se pueden ir construyendo con la creatividad e imaginación del alumnado y profesionales de la arquitectura.
En el acto estuvieron presentes por parte de la UAM-X: el arquitecto Francisco Haroldo Alfaro Salazar, director de la División de CyAD, el maestro Gerardo Álvarez, jefe del Departamento de Métodos y Sistemas; el maestro Manuel Lerín Gutiérrez, jefe del área de investigación Espacios Habitables y Medio Ambiente, y el doctor Salvador Duarte Yuriar, responsable de los convenios.
Por parte del Instituto para la Seguridad de las Construcciones asistió la licenciada Georgina Becerril Gutiérrez, coordinadora de Asuntos Jurídicos; la ingeniera Paulina Araceli Aguilar Ortega, subdirectora de Estudios e Investigaciones y el ingeniero Ricardo Alejandre Melgarejo, subdirector de Control de Directores Responsables de Obra, Corresponsables y Revisores. Y por parte de empresa Sísmica de Suelos acudieron la ingeniera Yoleida Suárez Arellano y el arquitecto Erick Moreno Islas.
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