Reportera: Guadalupe Ochoa Aranda
Fotografías: José Ventura Flores Velasco

Los ingenieros agrónomos, formados en las universidades públicas, deben tener un papel prioritario para satisfacer la demanda alimentaria en la consolidación del segundo gobierno de la 4T. Es necesario que propongan tecnologías e insumos para la producción de maíz, trigo, frijol y arroz, que estén acordes con los predios, las condiciones climatológicas y el tipo de suelo.

Así lo expuso Noemí Levy Orlik, de la Facultad de Economía de la UNAM y ensayista del libro Ideas para continuar la 4T, una obra colectiva que reúne nueve contribuciones de científicos y expertos en diversas áreas de conocimiento,  y que  se presentara en la sala Catalina Eibenschultz, de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Xochimilco, con el objetivo de promover un diálogo constructivo sobre el rumbo que podría tomar la Cuarta Transformación en México.

En un acto conducido por la doctora Patricia Couturier Bañuelos, académica del departamento de Producción Económica, de la División de Ciencias Sociales y Humanidades, la doctora Levy advirtió que la producción de granos, particularmente de maíz, no será una tarea fácil, ya que implica la modificación de los acuerdos del T-MEC y garantizar un sistema de riego efectivo.

A lo anterior, dijo, se debe añadir el ordenamiento de la renta de la tierra ejidal controlada por los grandes exportadores, además será necesario controlar a los intermediarios comerciales con precios de garantía, esquemas de distribución públicos y garantizar centros de acopio para los granos. Asimismo, es imperioso el trámite de créditos baratos y oportunos para el proceso siembra y cosecha, así como los seguros por pérdidas agrícolas generados por el clima.

Al referirse a las materias primas, la doctora Levy destacó que éstas deben beneficiar a los mexicanos y manifestó la importancia de “garantizar la producción doméstica de gasolinas, diésel, electricidad y gas, pues, aunque hay avances en el sector de producción de gasolinas, se debe continuar con la reforma eléctrica y avanzar con la producción de energías limpias, acompañado por precios estables para no desatar procesos inflacionarios”.

Advirtió que cada estado de la República debe “consolidar una actividad económica prioritaria, liderada por una empresa pública que se combine con la pequeña y mediana empresa”. Este tipo de entidad sería el resultado de una decisión tripartita (gobierno federal, estatal y municipal, en acuerdo con el sector privado) con financiamiento también tripartito, especificó.

Sobre este tema, la economista observó que “los procesos de industrialización que son exitosos requieren de proyectos productivos que transiten de lo simple a lo complejo, con tecnología propia o, al menos, que la tecnología extranjera se adapte a las condiciones de producción de la economía mexicana”. Éstos se deben enfocar en los productores de bienes de capital e insumos intermedios doméstico, a fin de que satisfagan la producción nacional.

Al hablar de las materias primas estratégicas como el litio, petróleo, cobre, oro y plata, la doctora Levy dijo que éstas deben ser procesadas por industrias mexicanas, preferentemente estatales. Por otro lado, subrayó que, en el caso de las empresas privadas, éstas deben cubrir el costo directo de extracción y costos indirectos (daños al medio ambiente), y pagar royalties por extraer un bien no renovable.

Éste y otros temas fueron abordados en la presentación Ideas para continuar la 4T, que propone continuar los pasos marcados hasta el momento a fin de erradicar la corrupción, la impunidad y el dominio oligárquico, con acciones políticas reales y simbólicas, iniciativas legales, reformas constitucionales incisivas y medidas económicas.