El Colillatón acopió 12 kilos de colillas en tan sólo una hora
Cobertura UAM Xochimilco
Reportera: Guadalupe Ochoa Aranda
En tan sólo una hora, decenas de alumnos y alumnas acopiaron alrededor de 12 kilos de colillas de cigarros que diariamente son arrojadas en los jardines y espacios universitarios, en el marco del Colillatón, una de las muchas campañas de recolección y manejo de desechos que realiza el Programa de Universidad Sustentable de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Unidad Xochimilco, para concientizar a las y los universitarios sobre la necesidad de separar los residuos peligrosos o nocivos al medio ambiente, como lo son los filtros de los cigarrillos.
Este proyecto de servicio social propuesto por alumna Samantha Castillo Becerril, de la licenciatura en Psicología de la División de Ciencias Sociales y Humanidades, surgió tras enterarse que “de las colillas se desprenden 7,000 químicos nocivos para los suelos y organismos vivos, y su degradación puede durar hasta 25 años en el ambiente”.
A unos días de celebrar El día mundial sin tabaco (30 de junio), el Colillatrón arrancó acompañado de pláticas y diez infografías sobre un conjunto de daños tanto ambientales como perjudiciales para la salud. La idea de esta actividad nació cuando Samantha observó a un compañero levantar todas las colillas de cigarro al término de una fiesta.
La alumna informó que “en un año se tiran 4.5 billones de colillas de cigarro, las cuales acumulan 845,000 toneladas”; por otro lado, comentó que las colillas mal apagadas provocan decenas de incendios forestales, los cuales devastan el hábitat de fauna y flora. “Se pierden 37,000 hectáreas de vegetación por la actividad tabacalera mexicana controlada por tres grandes compañías: Philip Morris Internacional, British American Tabaco y Japan Tabacco. Y los fumadores producen al año 225,000 toneladas de dióxido de carbono (CO2), el equivalente a 2,000 emisiones de automóviles después de recorrer 10,000 kilómetros”, apuntó Castillo.
Samantha contactó a la empresa Ecofilter, única en el manejo y degradación de colillas, la cual tuvo a bien donar 10 contenedores que fueron distribuidos en distintos espacios de la UAM Xochimilco.
En su charla, Paola Garza, de Ecofilter, señaló que en la parte social-ambiental de la empresa se puso en marcha un tratamiento de colillas, a partir de un proceso biotecnológico que ayuda a degradar hasta un veinte por ciento de las colillas por medio de un micro-organismo (hongo) proveniente de la sierra michoacana.
“Además, desintoxica totalmente los filtros del cigarro de sustancias tóxicas que llegan a contaminar hasta 50 litros de agua dulce y 13 litros de agua salada, para convertirlos en pulpa maleable para hacer papel, bisutería o lápices”, señaló.
La doctora Mayra Nieves Guevara, responsable del Programa Universidad Sustentable, mencionó que el Colillatón, el Ecotianguis, el Reciclatrón (residuos electrónicos), el manejo de residuos altamente tóxicos, la separación de basura y otras campañas como la concientización sobre el ahorro de agua y energía se acompañan con la impartición de talleres o círculos de reflexión con alumnos, alumnas y colectivos para hablar de sus experiencias de sustentabilidad.
Agregó que toda acción de “extraer, producir, consumir y tirar tiene su contraparte, que consiste en separar, reciclar, reutilizar, reparar; lo cual se debe ser tomado en cuenta para generar una cultura ambiental universitaria que llegue a todos los hogares”. Toda esa cadena de desechos (plásticos, cartón, vidrio) que no son separados generan basura, afectando los ecosistemas.
Universidad Sustentable se conforma con 22 alumnos de servicio social y es parte de una comisión interdisciplinaria, compuesta por académicas y académicos para generar acciones sustentables integrales. A esta actividad se sumó la doctora Sofía de la Cruz, responsable del Programa de Universidad Saludable, para hablar sobre las enfermedades asociadas al consumo de cigarro: como pulmonares, cardiacas, bronquitis crónica, enfisema y neumonía, así como diversos tipos de cáncer que causan la muerte de cuatro millones de personas al año, de acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud.
Qué increíble actividad y propuesta para hacer conciencia sobre la cantidad de residuos que las personas fumadoras pueden generar. No tenía idea de que los niveles de contaminación fueran tantos y que impactan no sólo aire, sino suelos y aguas.
Me encantó la iniciativa, ojalá continúen con las recolecciones y se le dé más difusión.