Reportera: Guadalupe Ochoa Aranda

La Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Xochimilco (UAM-X), recibió a la Generación 100, tras cumplir sus 50 años de existencia. El entusiasmo de cientos de jóvenes estudiantes por pertenecer a la comunidad universitaria se reflejó en los rostros jubilosos que regalaban sonrisas a sus pares y en esas miradas brillantes por el logro de haber obtenido un lugar en una de las principales universidades del país.

A las 9:30 horas, las egresadas Cecilia Ezeta y Nancy Camacho recibieron al estudiantado en el Centro Cultural UAM-X, en donde narraron anécdotas amenas de su vida estudiantil y dieron información sobre la importancia de las nuevas formas de adquirir conocimiento mediante el sistema modular.

De pronto, una secuencia fotográfica apareció en las pantallas para contar la historia fundacional del plantel Xochimilco, protagonizada por figuras académicas que creyeron y apostaron todo por este modelo educativo innovador denominado Proyecto Xochimilco. También surgieron imágenes del devenir universitario vividas por estudiantes, profesores y personal administrativo.

A las 10:00 horas, el rector Francisco Javier Soria López hizo su arribo en compañía de la secretaria de la Unidad y los directores Divisionales de biológicas, diseño y sociales. Sin ocultar su alegría, el rector reconoció el esfuerzo del estudiantado en este proceso de selección para ocupar un lugar en una de las 18 licenciaturas que ofrece la UAM-X.

Un estruendo de aplausos atravesó muros y jardines universitarios. El bullicio cedió cuando el doctor Soria López habló sobre la demanda de ingreso anual que alcanza alrededor de 40 mil aspirantes y, “desafortunadamente”, sólo hay cupo para 3 600 alumnos y alumnas en sus aulas.

El rector hizo un exhorto a los futuros profesionales a que “se apropien de esta universidad que se distingue por formar ciudadanos socialmente comprometidos, con pensamiento crítico y orientada a la resolución de problemas de la realidad social”. Porque estar matriculado en una universidad gratuita con financiamiento público implica concluir sus estudios y retribuir profesionalmente a la sociedad.

La doctora María Angélica Buendía Espinosa, secretaria de la Unidad, invitó a conocer los servicios que presta la universidad: biblioteca, librería, cómputo, cafetería, espacios deportivos, gestión ambiental y servicios médicos. Convocó al alumnado a participar en los órganos colegiados, en los que se discuten y deciden cuestiones relevantes de la institución con los sectores que la componen.

Por su parte, la doctora Esthela Irene Sotelo Núñez, directora de la División de Ciencias Sociales y Humanidades, indicó que el trabajo en equipo es uno de los pilares del sistema modular. Se realiza a través de una convivencia que expresa la inclusión, la diversidad y el respeto a las ideas en todo espacio universitario, los cuales contribuyen a la construcción de una cultura de paz. 

El doctor Luis Amado Ayala Pérez, director de la División de Ciencias Biológicas y de la Salud, señaló la fortuna que tiene el alumnado de pertenecer a la Unidad más bella de la UAM y a una de las divisiones con mayor demanda en las ocho licenciaturas que imparte, principalmente enfocadas al servicio de salud (humano y animal).

El arquitecto Francisco Haroldo Alfaro Salazar, director de la División de Ciencias y Artes para el Diseño, en su mensaje, observó la relevancia de pertenecer a la Generación 100, por ser un hecho significativo, simbólico e histórico de la vida universitaria. “Yo fui egresado de la quinta generación y, al igual que ustedes, recorrí estas instalaciones en las cuales me formé, aproveché y gocé”. 

El doctor Roberto Escorcia Romo, coordinador del Tronco Interdivisional, presentó el video que introduce al alumnado a la vida académica, en el cual se muestra la convicción de servicio a la comunidad y el enfoque interdisciplinario, donde todas las licenciaturas intervienen en temas de salud colectiva, vivienda, pobreza, diseño de ciudades, violencia o problemas ecológicos, entre otros.

Alumnos, alumnas, personal académico y administrativo se tomaron la foto conmemorativa de la Generación 100. La ceremonia concluyó al grito unísono de “digna, libre y soberana, digna, libre y soberana, arriba, arriba la Metropolitana”. Posteriormente, el alumnado participó en la Feria de Servicios con juegos y actividades lúdicas que dieron por terminado un acto más de bienvenida colmado de ilusiones y de una historia académica que esta por escribirse.