Arribar hacia ambientes sostenibles y saludables, una responsabilidad colectiva
Cobertura UAM Xochimilco
Reportera: Guadalupe Ochoa Aranda
“Arribar a un estilo de vida sostenible y saludable implica el involucramiento de los sectores sociales, industriales, universitarios y gubernamentales, cuyas visiones permitan un abordaje interdisciplinario a problemáticas que afectan la salud humana y al medio ambiente, como lo es el cambio climático, la movilidad sostenible y la alimentación saludable”, señaló el doctor Francisco Javier Soria López, rector de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Unidad Xochimilco, en la ceremonia de apertura al Foro Ambientes Sostenibles y Saludables.
El rector mencionó que desde 2019 la Comisión Intersectorial de Promoción de la Salud de la Ciudad de México (CIPS-CDMX) busca, desde la intersectorialidad, “estrategias para alcanzar niveles de salud eficaces y sostenibles, sin olvidar la responsabilidad individual que tiene la persona de informarse sobre las acciones de habilitación y rehabilitación de nuestro entorno”.
En el acto inaugural, la doctora Olivia López Arellano, secretaria de salud de la Ciudad de México y egresada de la licenciatura en Medicina
de la UAM Xochimilco, sostuvo que el trabajo intersectorial es un encuentro cara a cara con los distintos actores de la territorialidad para entender los problemas de salud, el derecho a la ciudad, la garantía de los derechos sociales e individuales, a fin de lograr un ambiente sano para los ciudadanos.
La doctora explicó que la Comisión Intersectorial “incide en los determinantes sociales de la salud como lo es el abasto, acceso a alimentos, entornos habilitantes, espacios saludables y en todo aquello que tiene que ver con producir salud como sociedad”.
En la conferencia magistral “Contribución de los Sistemas Alimentarios a la Salud Planetaria”, dictada por el doctor Juan Ángel Rivera Dommarco, investigador del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), alertó que el calentamiento global provocado por la emisión de gases de efecto invernadero; el uso excesivo de nitrógeno y fósforo (fertilizantes y pesticidas); la conversión de tierra para la agricultura y la extinción masiva de especies, entre otros, “pondrán en riesgo nuestro sistema alimentario para el 2050”.
Dijo que estamos muy cerca de rebasar los límites planetarios por las prácticas de consumo y desechos producidos por la actividad del hombre que coloca en peligro la resiliencia del planeta y por tanto la vida humana.
Observó que si bien existe alimento para sostener la vida de millones de personas en el mundo, aún existe hambre y desnutrición. Por ejemplo, en México “una cuarta parte de los hogares del país se perciben con inseguridad alimentaria; el 14.2 por ciento de menores de cinco años tiene desnutrición crónica; el 33 por ciento de menores de cinco años padece anemia; el 75 por ciento de mujeres, el 70 por ciento de hombres, el 37 por ciento de escolares y el 42 por ciento de adolescentes tienen sobrepeso y obesidad”.
El doctor Rivera, dijo que entre los impactos negativos a la tierra están los gases de efecto invernadero que producen las heces de rumiantes, cerdos y pollos; un tercio de toda la comida producida se pierde a lo largo de la cadena alimenticia y el 72 por ciento de alimento se desperdicia desde pre-cosecha hasta su distribución; grandes cantidades agua potable son utilizadas en bebidas azucaradas y, los empaques producen toneladas de plástico que degradan el medio ambiente.
“Si todos adoptamos una dieta saludable y sostenible alta en verduras y baja en productos
animal, sin comida chatarra ni alimentos ultra-procesados, así como evitar los desperdicios, impulsar el uso de técnicas agropecuarias amigables con el ambiente, uso racional del agua, evitar los plaguicidas, todo ello aunado a políticas públicas valientes, para el 2050 estaremos dentro de los límites planetarios” concluyó.
En la apertura del evento también estuvieron presentes la doctora Francisca Acevedo Gasman, coordinadora de Agrobiodiversidad de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) y el doctor Luis Amado Ayala Pérez, secretario académico de la División de Ciencias Biológicas y de la Salud.
