Reportera: Guadalupe Ochoa Aranda
Fotografías: José Ventura Flores Velasco

Los lenguajes y procesos culturales, así como la incidencia social en la comunicación y política, fueron los temas que dieron pie a la reflexión del núcleo de académicos y egresados de la maestría en Comunicación y Política, de la Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco (UAM-X), en la celebración de su XXV aniversario, cuya inclinación fue trazar un horizonte hacia el futuro. En el encuentro se escucharon las voces de quienes han dado sentido a un posgrado reconocido por CONAHCYT.

El Centro Cultural de la UAM-X fue el espacio de congregación, física y virtual, donde afloraron muestras de afecto y la memoria colectiva de todos aquellos que han pasado por las aulas de académicos distinguidos, como Carmen de la Peza Casares, Raymundo Mier Garza, Silvia Gutiérrez Vidrio, Eduardo Andión Gamboa, Margarita Zires Roldán, y de quienes, como egresados, se han incorporado al cuerpo docente de nuestra casa estudios, como Mario Rufer, Guiomar Rovira Sancho, Jerónimo Repoll y Yissel Arce Padrón, entre otros.

El doctor Repoll, coordinador de la licenciatura de Comunicación Social (UAM-X), señaló que, siendo químico y doctor en periodismo por la Universidad de Barcelona, ha incursionado en las líneas de investigación en medios, culturas populares, recepción y audiencias, interculturalidad, derecho a la comunicación y, actualmente, desarrolla el proyecto Cultura de la pantalla entre la ideología, la economía política y la experiencia, así como un estudio sobre El rol social, exhibición cinematográfica y su consumo en la Ciudad de México.

Señaló que los procesos de comunicación se transforman de manera dramática y que los académicos “también hacemos un dramático esfuerzo para pensar cuál es el objeto de estudio pertinente, cómo posicionarlo y cómo intervenirlo socialmente”. Y es precisamente el alumnado, el que pone sobre la mesa inquietudes sobre los procesos de mediatización, el entorno socio digital, el moldeamiento social desde la vida cotidiana, los procesos de convergencia tecnológica y de mutación cultural contemporánea.

Aclaró que “cuando se habla de proceso de rediseño, por ejemplo,­­­ de la licenciatura en Comunicación Social, seguimos anacrónicamente hablando de radio, cine, televisión, algo totalmente distante a lo que sucede hoy. Por ello, lo relevante es que hace 25 años la maestría en Comunicación y Política anunciaba y centralizaba el tema de los lenguajes, la producción y circulación de sentido”. Adicionalmente, mencionó que “hoy se tiene la posibilidad de resignificar aquellos procesos de mediatización en los cuales se construye la experiencia del mundo, y que tiene que ver con el proceso de pluralización de la enunciación”. Lo anterior, enfatizó, genera problemas en la construcción del sentido común, ya que esto plantea articulaciones específicas entre lo global y lo local, lo que entraña necesariamente una ruptura y, por tanto, una crisis permanente de sentido que tiene que ver con la interculturalidad.

Violencia-interculturalidad genera desplazamientos de personas, y de ahí se desprenden otros problemas acuciantes, que ha mencionado la doctora Carmen de la Peza, como es la circulación de nuevas y radicales formas simbólicas de comprender la realidad, eso, más el entorno digital y el sistema de comunicación masiva aún existente, cohabitan en la sociedad de plataformas. Lo anterior, concluyó Repoll, es ineludible para nuestro posgrado, puesto que el lenguaje y la producción de sentido moldean lo social, entonces, ¿cómo construimos el conocimiento? y, por tanto, como dijo Manuel Castells: “tenemos que reprogramar la red”.

Fue un reencuentro gozoso, donde se narraron experiencias, propuestas y se hizo un balance positivo, sin faltar la música para festejar este XXV aniversario de la maestría en Comunicación y Política, que actualmente coordina la doctora Reyna Sánchez Estévez.